Sobre la mala suerte hay muchas creencias. Hay quien cree que se trata de espíritus malignos, quien cree que se trata de energías que son resultado del azar, etc. Pero en lo que todos coincidimos, independientemente de nuestras creencias, es en que no la queremos para nosotros. En este artículo vamos a presentarte un ritual para alejar la mala suerte.
El hechizo que presentamos a continuación es muy sencillo de realizar. Los materiales que necesitaremos serán un pedazo de cuadrado de papel de 10 cm x 10 cm, un marcador negro o una pluma de tinta negra; un caldero, plato o recipiente que pueda recibir fuego sin estropearse y materiales para encender ese fuego. (Puede ser virutas de pino, por ejemplo)
Antes de comenzar, es necesario recordar que el mejor momento para realizar este ritual es durante la Luna Nueva que simboliza el comienzo de un nuevo ciclo. En este procedimiento podemos invocar a cualquiera de los cuatro elementos: el fuego que consume, el agua que limpia, la tierra que desecha y el aire que disipa.
Ahora bien. De noche, encendemos el fuego en el recipiente que hayamos elegido. Escribimos en el papel las palabras “MALA SUERTE”, pensamos unos minutos sobre las circunstancias que creemos que no nos han ido bien y las escribimos también en el papel. Si para ti todo ha ido bien entonces no escribas nada.
Dibuja una gran X sobre el papel con el marcador negro tachando lo que has escrito en él. Tira el papel al fuego y di tres veces:
“Noche oscura, fuego ardiente, mi suerte cambia lentamente. Hago que esta carga se desvanezca, ahora ya mi vida se endereza”
A continuación, meditamos por unos segundos concentrándonos en cómo la mala suerte se va marchando y cómo la buena energía nos va invadiendo poco a poco. Apagamos el fuego y nos deshacemos de las cenizas de cualquiera de las siguientes maneras:
Agua: Mientras tiras las cenizas al agua repite: “Agua pura, agua corriente, cargo contigo mi mala suerte. Lleva mis pesares donde irás, aquí estas cosas no volverán”
Tierra: Mientras tiras las cenizas a la tierra repite: “Tierra oscura, fría y fuerte, te pido ahora que corrijas este mal. Lévate toda la mala suerte. Tráeme alegría y tráeme paz”
Aire: Acudir a un lugar tan alto como sea posible. Sopla las cenizas al viento mientras dices: “Vientos del cambio, los puedo sentir, lleven la mala suerte lejos de mí. Su poder en el airé disiparán. Mis profundos deseos concederán”
En cualquiera de los tres casos, al deshacernos de las cenizas, debemos concentrarnos en sentir como las malas energías se van de nuestro cuerpo y nuestra mente y son reemplazadas por energías positivas.
¿Has probado este ritual? ¿Conoces algún otro que desees compartir?